La humanidad está necesitada de amor, la tierra necesita
que la cuiden, el inmigrante añora su país, esta tierra está necesitada de paz.
Campesinos y trabajadores, creyentes y aquellos que
siguen buscando, seamos todos agentes de paz en nuestro caminar.
La división genera desaliento, mientras que la unión es
portadora de esperanza; el odio engendra sufrimiento, sin embargo el perdón es
una fuerza liberadora.
La vía del diálogo, de la reconciliación, del amor, de la
liberación, de la justicia y la paz, son todas ellas el camino a la felicidad.