A veces la ceguera inunda mi corazón,
y todo me abruma o me aburre.
Dame ojos nuevos
para verte caminando
por las calles de mi ciudad.
Dame ojos nuevos
abiertos a la sorpresa, sedientos de autenticidad.
Dame ojos nuevos capaces de construir,
un mundo de esperanza.
Dame ojos nuevos para que me atreva
a mirar a la vida y a los demás
con dulzura y esperanza.