Entrados en el mes de mayo, se celebra en Valencia y otras ciudades las "Cruces de mayo". Arreglos florares que nos recuerdan que tras la resurrección de Jesús la cruz no se ha quedado vacía, sino que vive y florece. La primavera hace renacer lo que parecía muerto, y así los cristianos tomamos este hecho como símbolo de esperanza, alegría y fe.
Pidamos a Dios en esta mañana que nos ayude a renacer continuamente, que nos dé fuerzas para no quedarnos sin esperanza.