El evangelio que leímos ayer nos invita a hacer esta reflexión...
¡Todos
los años en Cuaresma se nos brinda una nueva oportunidad de cambiar nuestras vidas, de dejar a un lado todas las cosas malas que hemos hecho y arrepentirnos de ellas. Es como limpiar el
historial, las cookies, las contraseñas… y empezar de nuevo.
La invitación es a abandonar nuestra "vidorra
comodona" y convertirnos en esas personas que son necesarias para el bien del
mundo. Tenemos que dar gracias a Dios, Él es el que nos brinda esa nueva
oportunidad. ¿Cuándo vas a aprovecharla? En este tiempo de Cuaresma podrías empezar
a poner los cimientos para esa nueva vida. ¿Sientes necesario en tu vida
intentar el cambio que Jesús nos está ofreciendo? ¿A qué te puedes comprometer para hacer real ese cambio? ¿Vas a dejar a Jesús trabajar en tu corazón?
Dejamos un minuto de silencio