Julio, Servando, Fernando y Miguel Ángel, fueron cuatro Hermanos
Maristas que ofrecieron su vida en el Zaire a favor de los más
necesitados en el campo de refugiados de Nyamirangwe (Bugobe, Zaire) Hoy
día siguen siendo ejemplo de VIDA...
Finalizamos nuestra oración rezando:
Padre Nuestro... San Marcelino Champagnat, ruega por nosotros. Mare de Déu de la Salut, ruega por nosotros.
Se acerca el 31 de octubre y queremos recordar que el 31 de octubre de 1996 fueron asesinados en el campo de refugiados de Nyamirangwe - Zaire:
Servando Mayor García, Miguel Ángel Isla Lucio, Fernando de la Fuente de la Fuente y Julio Rodríguez Jorge.
Finalizamos nuestra oración rezando:
Padre Nuestro... San Marcelino Champagnat, ruega por nosotros. Mare de Déu de la Salut, ruega por nosotros.
Lectura del santo evangelio según san Marcos (10,46-52):
En aquel tiempo, al salir Jesús de Jericó con sus discípulos y bastante
gente, el ciego Bartimeo, el hijo de Timeo, estaba sentado al borde del
camino, pidiendo limosna. Al oír que era Jesús Nazareno, empezó a
gritar: «Hijo de David, Jesús, ten compasión de mí.»
Muchos lo regañaban para que se callara. Pero él gritaba más: «Hijo de David, ten compasión de mí.»
Jesús se detuvo y dijo: «Llamadlo.»
Llamaron al ciego, diciéndole: «Ánimo, levántate, que te llama.» Soltó el manto, dio un salto y se acercó a Jesús.
Jesús le dijo: «¿Qué quieres que haga por ti?»
El ciego le contestó: «Maestro, que pueda ver.»
Jesús le dijo: «Anda, tu fe te ha curado.» Y al momento recobró la vista y lo seguía por el camino. Palabra del Señor
Reflexión
En nuestra sociedad a veces también resulta de poca educación poner al
descubierto nuestras pobrezas, nuestras limitaciones. Pero los pobres,
los oprimidos, los que sufren la injusticia y el dolor están siempre
ahí. Por más que les echemos de nuestro barrio o miremos a otra parte
cuando pasan cerca de nosotros. Jesús devuelve la vista al ciego. Pero el milagro físico de devolverle
la vista nos habla de otro milagro más profundo. Parece que el ciego
empieza a ver no sólo con los ojos sino también con el corazón. Ése es el milagro que hoy le tenemos que pedir a Jesús con todas las
fuerzas. Que nos cure el corazón, que nos abra los ojos, para creer,
para levantarnos y caminar mano a mano con nuestros hermanos y hermanas,
construyendo fraternidad, construyendo reino, trabajando para que nadie
se quede a la vera del camino, marginado, abandonado,
Finalizamos nuestra oración rezando:
Padre Nuestro... San Marcelino Champagnat, ruega por nosotros. Mare de Déu de la Salut, ruega por nosotros.
INFANTIL-PRIMARIA
Finalizamos nuestra oración rezando:
Padre Nuestro... San Marcelino Champagnat, ruega por nosotros. Mare de Déu de la Salut, ruega por nosotros.
Aunque nos pueda sorprender, el primer símbolo que los cristianos utilizaron para identificarse como seguidores de Jesús no fue la cruz, sino el pez. Concretamente el "piscis" se utilizó hasta el siglo IV, cuando las persecuciones eran tremendamente duras y ser cristiano implicaba jugarse la vida.
En la oración de hoy queremos hacer presente a los jóvenes, pues ellos son el futuro. Especialmente queremos sumarnos a las intenciones del Papa Francisco y acordarnos de los jóvenes que viven en África, pues las posibilidades de formación y educación son más complicadas para los que viven este continente.
Hay muchos que sólo se sienten bien cuando se sienten poderosos,
cuando los demás les rodean llenos de admiración y envidia. Se creen muy
seguros. Tienen poder y dinero. Y piensan que no les hace falta nada
más en la vida. Algunos también creen que la Iglesia debería ser
igualmente poderosa. Así, piensan, sería mas respetada y más personas
creerían en Jesús y entrarían a formar parte de ella.
Me atrevería a decir que se equivocan totalmente. En el Evangelio de este pasado domingo, Jesús nos decía: Vosotros, nada de eso: el que quiera ser grande, sea vuestro servidor; y
el que quiera ser primero, sea esclavo de todos. Porque el Hijo del
hombre no ha venido para que le sirvan, sino para servir y dar su vida
en rescate por todos.
La vida cristiana se juega en el día a día. En casa, con la familia, y
en la calle, con los amigos y los compañeros de tareas. Yo no puedo ser
"cristiano" sin los otros, sin los demás. Por eso debo preguntarme,
antes o después, ¿me importan los demás? ¿Estoy dispuesto a hacer algo
bueno, noble, que me sea costoso, por los demás? Jesús entendió su vida
como "entrega por los demás". Este es el camino de los discípulos.
Finalizamos nuestra oración rezando:
Padre Nuestro... San Marcelino Champagnat, ruega por nosotros. Mare de Déu de la Salut, ruega por nosotros.
Hi ha històries que ho canvien tot. Els missioners i missioneres són l’exemple de que el canvi del món és possible i urgent. Amb la seua entrega i amb l’anunci de l’Evangeli, ells canvien la història de moltes de persones. Persones transformades que transformen altres vides. És un canvi silenciós, a llarg termini, que comença ara, i que mou el món.
Finalitzem la nostra oració pregant:
Pare Nostre... Sant Marcel·lí Champagnat, prega per nosaltres. Mare de Déu de la Salut, prega per nosaltres.
Ayer domingo celebramos en toda la Iglesia el Domund. En esta fiesta la Iglesia universal reza por los misioneros y colabora con las misiones. En nuestra oración de esta mañana, a través de este vídeo, nos acordaremos, de un modo especial, de todas aquellas personas que dan testimonio de Jesús por todo el mundo.
Finalizamos nuestra oración rezando:
Padre Nuestro... San Marcelino Champagnat, ruega por nosotros. Mare de Déu de la Salut, ruega por nosotros.
En la oración de hoy nos queremos acordar de nuestras
familias. Aunque ninguna familia es perfecta, todas tienen en común el respeto
por el otro y el amor duradero, valores que las convierten en un tesoro a
proteger. Demos gracias a Dios por cada una de ellas y pidamos para que nos dé
fuerza para que hagamos más visible en ella el amor.
Todo es posible cuando confiamos en Dios, a pesar de los miedos y dificultades que tenemos, Dios se vale de muchas personas en las que poder apoyarnos.
Para la oración y compartir:
Piensa en esas personas que son un apoyo para ti. Da gracias a Dios por ellas.
El Reino es para los pobres porque ellos, precisamente por ocupar el último lugar social, económico y religioso, poseen la mirada adecuada para descubrirlo y abrirse a él.
Lectura del santo evangelio según san Marcos (10, 17-30):
En aquel tiempo, cuando salía Jesús al camino, se le acercó uno corriendo, se arrodilló y le preguntó: «Maestro bueno, ¿qué haré para heredar la vida eterna?»
Jesús le contestó: «¿Por qué me llamas bueno? No hay nadie bueno más que Dios. Ya sabes los mandamientos: no matarás, no cometerás adulterio, no robarás, no darás falso testimonio, no estafarás, honra a tu padre y a tu madre.»
Él replicó: «Maestro, todo eso lo he cumplido desde pequeño.»
Jesús se le quedó mirando con cariño y le dijo: «Una cosa te falta: anda, vende lo que tienes, dale el dinero a los pobres, así tendrás un tesoro en el cielo, y luego síguerne.»
A estas palabras, él frunció el ceño y se marchó pesaroso, porque era muy rico. Jesús, mirando alrededor, dijo a sus discípulos: «¡Qué difícil les va a ser a los ricos entrar en el reino de Dios!»
Los discípulos se extrañaron de estas palabras. Jesús añadió: «Hijos, ¡qué difícil les es entrar en el reino de Dios a los que ponen su confianza en el dinero! Más fácil le es a un camello pasar por el ojo de una aguja, que a un rico entrar en el reino de Dios.»
Ellos se espantaron y comentaban: «Entonces, ¿quién puede salvarse?»
Jesús se les quedó mirando. y les dijo: «Es imposible para los hombres, no para Dios. Dios lo puede todo.»
Pedro se puso a decirle: «Ya ves que nosotros lo hemos dejado todo y te hemos seguido.»
Jesús dijo: «Os aseguro que quien deje casa, o hermanos o hermanas, o madre o padre, o hijos o tierras, por mí y por el Evangelio, recibirá ahora, en este tiempo, cien veces más casas y hermanos y hermanas y madres e hijos y tierras, con persecuciones, y en la edad futura, vida eterna.»
Palabra del Señor
Reflexión
Eso es lo que nos pide Jesús cada día, no vivir apegados a las riquezas, a nuestro bienestar… Al leer el evangelio todos pensaremos igual que el joven cumplimos con los mandamientos, cumplimos cada domingo con la asistencia a la Eucaristía, pero nos falta lo principal «Amar a nuestro prójimo», compartir lo que somos y lo que tenemos. Deberíamos como cristianos replantearnos ¿Somos capaces de renunciar a nuestro bienestar y compartirlo? ¿De qué nos sirve poseer todo si perdemos la alegría de seguir a Jesús? ¡¡¡Feliz semana a todos!!!
Finalizamos nuestra oración rezando:
Padre Nuestro... San Marcelino Champagnat, ruega por nosotros. Mare de Déu de la Salut, ruega por nosotros.
INFANTIL-PRIMARIA
Finalizamos nuestra oración rezando:
Padre Nuestro... San Marcelino Champagnat, ruega por nosotros.
Los ciegos, junto con los niños y los enfermos, fueron las personas más queridas por Jesús, según nos narran los evangelios. Él siempre tuvo tiempo para atenderles, aún cuando en aquella época la enfermedad estaba relacionada con el pecado y los que iban con los enfermos tachados de pecadores.
Jesús quiso cambiar el cumplimiento de la Ley judía de no acercarse a los enfermos por hacer presente la misericordia de Dios.
El hombre ha tratado mal a la mujer muchas veces. Durante siglos el
hombre no ha considerado a la mujer como su igual. A lo más una
compañera de cama pero no alguien digno de situarse a su mismo nivel,
con quien poder dialogar. El hombre se ha sentido dominador y ha visto a
la mujer como una más de sus pertenencias, uno más de los objetos a su
disposición. En nuestros días hay muchos hombres todavía que tratan a
las mujeres como objetos de placer o como esclavas que deben tener
limpia la casa y preparada la comida pero a las que no hay que dejar
decidir ni pensar ni tomar decisiones por sí mismas. Eso sucede en
muchos países, pero también en el nuestro. Los malos tratos, los abusos,
las violaciones, los asesinatos, son signos de esa realidad. Hay mucho
sufrimiento, a veces callado y en silencio, pero siempre demasiado, en
las mujeres de muchas familias.
Dios "los creo varón y mujer". Los dos han sido creados en igualdad.
Dios no ha creado al varón con poder sobre la mujer. No ha creado a la
mujer sometida al varón. Entre varones y mujeres no ha de haber
dominación por parte de nadie.
Finalizamos nuestra oración rezando:
Padre Nuestro... San Marcelino Champagnat, ruega por nosotros. Mare de Déu de la Salut, ruega por nosotros.
Lectura del santo evangelio según san Marcos (10,2-16):
En aquel tiempo, se acercaron
unos fariseos y le preguntaron a Jesús, para ponerlo a prueba: «¿Le es lícito a
un hombre divorciarse de su mujer?»
Él les replicó: «¿Qué os ha
mandado Moisés?»
Contestaron: «Moisés Permitió
divorciarse, dándole a la mujer un acta de repudio.»
Jesús les dijo: «Por vuestra
terquedad dejó escrito Moisés este precepto. Al principio de la creación Dios
"los creó hombre y mujer. Por eso abandonará el hombre a su padre y a su
madre, se unirá a su mujer, y serán los dos una sola carne." De modo que
ya no son dos, sino una sola carne. Lo que Dios ha unido, que no lo separe el
hombre.»
En casa, los discípulos volvieron
a preguntarle sobre lo mismo. Él les dijo: «Si uno se divorcia de su mujer y se
casa con otra, comete adulterio contra la primera. Y si ella se divorcia de su
marido y se casa con otro, comete adulterio.»
Le acercaban niños para que los
tocara, pero los discípulos les regañaban. Al verlo, Jesús se enfadó y les
dijo: «Dejad que los niños se acerquen a mí: no se lo impidáis; de los que son
como ellos es el reino de Dios. Os aseguro que el que no acepte el reino de
Dios como un niño, no entrará en él.»
Y los abrazaba y los bendecía
imponiéndoles las manos.
Palabra del Señor
Reflexión
Jesús sólo desea la felicidad del ser humano, nunca la infelicidad,
porque comprende que el proyecto de Dios es un proyecto de amor, dónde
no cabe el odio, la envidia, los egoísmos, sino ser iguales en dignidad.
Lo contrario es cerrar nuestro corazón y alejarnos de ese proyecto
liberador. Por ello, debemos ser como niños sencillos y agradecidos
acogiendo la Palabra de Dios para entrar en el Reino de los cielos que
es la salvación.
Finalizamos nuestra oración rezando:
Padre Nuestro... San Marcelino Champagnat, ruega por nosotros. Mare de Déu de la Salut, ruega por nosotros.
INFANTIL-PRIMARIA
Finalizamos nuestra oración rezando:
Padre Nuestro... San Marcelino Champagnat, ruega por nosotros. Mare de Déu de la Salut, ruega por nosotros.
En la oración de hoy queremos acordarnos del Papa Francisco quien ayer también celebró el día de su santo. Queremos rezar por él, para que Dios le dé fuerza y sabiduría para seguir actualizando y reformando la Iglesia.
Esta semana además se ha estrenado una película sobre su persona y que recoge algunas de sus experiencias
Hoy es el día de San Francisco, por eso, antes de comenzar la oración queremos felicitar a todos los Franciscos, Fran, Paco, Kiko, Francisca o cualquier otro derivado, que son muchos.
En la oración de hoy vamos a escuchar la oración de San Francisco, pero esta vez cantada. Para ello, antes de reproducir el vídeo vamos a cerrar los ojos, ya que lo importante va a ser escuchar, no verlo. Incluso podemos apagar hasta el proyector.
Así pues, nos sentamos cómodamente en nuestra silla. Ésto no es hacerlo como si de un sofá se tratara. Hemos de sentarnos con las plantas de los pies en el suelo, las rodillas dobladas formando un ángulo de 90º, la espalda recta y las manos apoyadas sobre las rodillas para que los hombros no estén en tensión.
Una vez dispuestos para la oración, escuchamos atentamente con los ojos cerrados, respirando profundamente y poniendo toda nuestra atención sólo en la voz que habla.
La causa de Jesús, el reino de Dios, excede con mucho los límites de la
comunidad y de la misma Iglesia. No sólo hay en el ancho mundo personas
capaces de realizar signos liberadores, sino que los cristianos hemos de
reconocerlo, agradecerlo y apoyarlo. El Espíritu de Dios no se encierra
en grupos o instituciones, sino que es soberanamente libre. El
sectarismo y la intolerancia no tienen sitio en la comunidad cristiana.
No puede haber envidias porque otros hagan el bien. Todos los que luchan
por la causa del ser humano, están con nosotros. No hay un solo combate
por la justicia que no esté silenciosamente en relación con el reino de
Dios, aunque los cristianos no lo queramos saber. Hoy toca abrir los
ojos y descubrir en el amplio mundo, fuera de mi comunidad, la gran
cantidad de grupos y personas que trabajan por la vida, siembran el
Reino y ayudan a los demás. Descubrir a profetas, testigos, discípulos,
amigos, hermanos... sin títulos, sin credenciales, sin banderas.
Acogerlos y alegrarme con ellos y por lo que ellos hacen. Gracias. No
somos pocos.
Lectura del santo evangelio según san Marcos (9,38-43.45.47-48): En aquel tiempo, Juan dijo a Jesús: «Maestro, hemos visto a uno que
expulsaba demonios en tu nombre y se lo hemos prohibido, porque no es de
nuestro grupo.»
Jesús replicó: «No se lo prohibáis, porque nadie que haga un milagro en
mi nombre puede luego hablar mal de mí. Pues el que no está contra
nosotros está a favor nuestro. Os aseguro que el que os dé a beber un
vaso de agua porque sois del Mesías no quedará sin recompensa. Al que
sea ocasión de pecado para uno de estos pequeños que creen en mí, más le
valdría que le colgaran del cuello una piedra de molino y lo echaran al
mar. Y si tu mano es ocasión de pecado para ti, córtatela. Más te vale
entrar manco en la vida, que ir con las dos manos al fuego eterno que no
se extingue. Y si tu pie es ocasión de pecado para ti, córtatelo. Más
te vale entrar cojo en la vida, que ser arrojado con los dos pies al
fuego eterno. Y si tu ojo es ocasión de pecado para ti, sácatelo. Más te
vale entrar tuerto en el reino de Dios que ser arrojado con los dos
ojos al fuego eterno, donde el gusano que roe no muere y el fuego no se
extingue.» Palabra del Señor
Reflexión
A veces, tenemos la tentación de mirar a todos los que no pertenecen a
nuestro grupo como extranjeros y enemigos. Ellos no piensan exactamente
como nosotros. Tienen un estilo y una forma diferente de hacer las
cosas. Quizá –y esto se dio antiguamente en el caso de las
congregaciones religiosas– hasta visten de forma diferente. Eso que
sucede dentro de la Iglesia Católica sucede también en relación con las
otras Iglesias, con las otras religiones... Miramos a los otros como
extraños y, de entrada, les condenamos porque no son como nosotros. Y
esa diferencia nos lleva a condenarlos.
El Evangelio de hoy nos recuerda algo muy importante: el Reino de
Dios es más grande que el pequeño grupo que formamos los discípulos de
Jesús, que los que estamos en nuestra parroquia, nuestra comunidad,
nuestro grupo o nuestra Iglesia. El Reino abarca a todos los hombres de
buena voluntad. Sin excepción.
Finalizamos nuestra oración rezando:
Padre Nuestro... San Marcelino Champagnat, ruega por nosotros. Mare de Déu de la Salut, ruega por nosotros.
INFANTIL-PRIMARIA
Finalizamos nuestra oración rezando:
Padre Nuestro... San Marcelino Champagnat, ruega por nosotros. Mare de Déu de la Salut, ruega por nosotros.