miércoles, 5 de octubre de 2016



HISTORIA PARA PENSAR

Cierto día un periodista consiguió una entrevista con Dios Padre. Durante la conversación el periodista preguntó: 
-"Señor ¿A qué seres humanos quieres más?." 
Dios sonrió y le dijo al periodista. 
- "A ver si adivinas". 
El periodista le contestó: -"Pues... Imagino que a las personas que entregan su vida al servicio de los demás, como la Madre Teresa o el Santo Maximiliano Kolbe. 
-"Sí, sí los quiero mucho. Pero no son a quien quiero más". 
El periodista fue nombrando todas las personas que se dedican al servicio de Dios en sus hermanos. 
-"Ya sé, Señor: las monjas y los sacerdotes". 
-"También, también los quiero pero no son a quien quiero más". 
-"Ya sé, los niños inocentes, los humildes que creen en Ti". 
-"Sí los quiero, pero no son los que quiero más". 
-"Pues ya no queda nadie, Señor". 
-"Sí quedan." respondió Dios. -"Los que dicen que yo no existo... ¡pobres mis hijos! Creo que les gustaría que fuese cierto... Los que me insultan, blasfemando contra Mí; 
los que quebrantan mis leyes y dicen que tienen el poder de cambiarlas; los impíos y pecadores empedernidos. Definitivamente, esos son los hijos a los que quiero más". 
-"¡Ateos! ¡No puede ser! Señor, me estás tomando el pelo ¿Cómo vas a amar tu negación?" 
-"No. No amo su ateísmo. Los amo a ellos porque están ciegos y no me ven. Yo los cuido sin que se den cuenta y me alegra mucho cuando alguno de ellos me descubre a su lado. Si tuvieses un hijo ciego. ¿No lo amarías igual?. Ellos son mis hijos aunque estén ciegos". 
- "Sin embargo, Señor", prosiguió el periodista, "A mí me enseñaron que los ateos se iban todos al infierno. Serán tus hijos más queridos pero Tú los mandas al infierno". 
Dios, sonriente, le contestó - "Yo no mando a nadie al infierno. Eso no es cierto. Al infierno va quien lo escoge con su vida. Yo os hice libres". 
El periodista lo miraba medio incrédulo.
Todavía Dios le dijo: -"Pues cuando un es hombre bueno pero no reconoce mi existencia... Para Mi lo importante es la Verdad. Si un hombre se consagra a su búsqueda, yo lo premio. Como si me buscase a mi. Porque Yo soy la Verdad. Lo mismo que el que busca la belleza". 
-"¿Y que pasa Señor si cree en Ti, pero maltrata a los demás y no cumple tus leyes? 
-"También intento curarlo. Son más de los hijos que más quiero.