El hombre ha tratado mal a la mujer muchas veces. Durante siglos el
hombre no ha considerado a la mujer como su igual. A lo más una
compañera de cama pero no alguien digno de situarse a su mismo nivel,
con quien poder dialogar. El hombre se ha sentido dominador y ha visto a
la mujer como una más de sus pertenencias, uno más de los objetos a su
disposición. En nuestros días hay muchos hombres todavía que tratan a
las mujeres como objetos de placer o como esclavas que deben tener
limpia la casa y preparada la comida pero a las que no hay que dejar
decidir ni pensar ni tomar decisiones por sí mismas. Eso sucede en
muchos países, pero también en el nuestro. Los malos tratos, los abusos,
las violaciones, los asesinatos, son signos de esa realidad. Hay mucho
sufrimiento, a veces callado y en silencio, pero siempre demasiado, en
las mujeres de muchas familias.
Dios "los creo varón y mujer". Los dos han sido creados en igualdad. Dios no ha creado al varón con poder sobre la mujer. No ha creado a la mujer sometida al varón. Entre varones y mujeres no ha de haber dominación por parte de nadie.
Finalizamos nuestra oración rezando:
Padre Nuestro...San Marcelino Champagnat, ruega por nosotros.
Mare de Déu de la Salut, ruega por nosotros.