lunes, 11 de diciembre de 2017

ProMueve a...
Juan es portador de Buena Noticia. Es coherente con sus palabras y hechos. ¿Promovemos con nuestras palabras y nuestros hechos buenas noticias? 
Cada día de la semana uniremos la oración con un elemento del cartel de la campaña muévete a la periferia
 
Empezamos a entrar de lleno en este final de trimestre y en la mitad de Adviento. Hemos pasado durante la primera semana por REmovernos y la segunda por CONmovernos. Ahora toca PROmover. Que como sabemos es ayudar a que pase algo.  Es lo que hizo Juan Bautista, preparar la llegada de Jesús, promoverlo. Él es el personaje de la semana: vamos a escuchar lo que dice.

 Texto evangélico
“Una voz grita en el desierto: Preparadle un camino al Señor, allanad sus senderos. Juan bautizaba en el desierto. Predicaba que se convirtieran y que se bautizaran, para que se les
perdonasen sus pecados. Acudía gente de Judea y de Jerusalén,confesaban sus pecados y él los bautizaba en el río Jordán.Juan iba vestido de piel de camello, con una correa de cueroa la cintura y se alimentaba de saltamontes y miel silvestre. Y proclamaba: - Detrás de mí viene el que puede más que yo, y yo no merezco agacharme para desatarle las sandalias. Yo os he bautizado con agua, pero él os bautizará con el Espíritu Santo.”  (Mc 1,1-8 )



Este es el cartel de las obras sociales maristas y en esta semana, en las oraciones de la mañana vamos a desgranarlo.
Vamos a comenzar por los planetas y las estrellas, que son todos diferentes, desconocidos pero atractivos y llamativos a la vez. Son como nosotros. Diferentes. Por eso también la palabra de Dios de hoy (que es la del próximo domingo) nos invita individualmente a cada uno a actuar de manera distinta. Es decir, Juan el Bautista es el encargado de anunciar la Buena Noticia y de gritarla, y lo hace con su voz y con su forma de vivir, con coherencia… Pues piensa un poco:
·         ¿Yo soy portador, con mi presencia, de buenas noticias?
·         ¿con mi palabra, abro caminos de amistad?
·         ¿con lo que digo hago sentir bien a los demás?
·         ¿cómo quieres que sean tus palabras esta semana?
·         ¿con quién tienes que hablar sí o sí?

Invitamos después a la clase a poder compartir una palabra… solo una. Algo que tengo que decirle a alguien y que quiero hacer esta semana.

Terminamos nuestra oración con un momento de silencio en el que le pedimos a Dios que seamos capaces de llevar su Palabra a nuestra boca durante esta semana.